domingo, 28 de agosto de 2016

SALVE REGINA (abadía de Notre-Dame de Fontgombault)



                                       SALVE REGINA

Un canto bien universal en el orbe católico, en este caso una versión clásica de la abadía de Notre-Dame de Fontgombault del SALVE REGINA, obviamente en latín. Qué recuerdos de aquellos tiempos en que el dudoso sentido del latín obligatorio –hoy ya no se estudia- encontraba  aplicada ilustración en  el latín litúrgico de la Iglesia donde hallaban confirmación la conjugación de los verbos y las declinaciones; si no los ablativos absolutos si los genitivos, los dativos, los nominativos plurales. Hoy parece que el latín es una lengua lejana, para ilustrados elitistas y parece que la Iglesia tiene preferencia por el caló y el cheli, ¡qué pérdida más lamentable de la hermosa lengua del Lacio!
Raramente escuchado en la Iglesia, tal vez lo sea aún menos en el futuro, donde el latín será considerado un gori-gori más extraño que el quechua o el swajili. Los últimos recuerdos personales se remontan a alguna boda de personal de mi quinta hoy día ya abuelos.

Salve regina mater misericordiæ
vita dulcedo et spes nostra salve.
Ad te clamamus, exsules filii Hevæ.
Ad te suspiramus, gementes et flentes
in hac lacrimarum valle.
Eia ergo, Advocata nostra,
illos tuos misericordes oculos ad nos converte.
Et Jesum, benedictum fructum ventris tui,
nobis post hoc exilium ostende.
O clemens, o pia,
o dulcis Virgo Maria.