Defienden el uso de una moneda local
en el municipio malagueño de Coín para enriquecerlo.
El
movimiento "Coín en Transición" pretende generar una riqueza
"que se queda en el pueblo" y recuperar la tradición de los trueques.
Ya hay unas
cien personas adheridas a esta red de apoyo, en la que se intercambian productos y servicios de
diversa índole.
El único
límite de esta moneda es que cada persona puede enriquecerse en un máximo de
200 coínes.
EFE.
11.08.2012
El uso de
una moneda local en el municipio malagueño de Coín —el "Coín"— ha
permitido, según sus impulsores, generar una riqueza "que se queda en el
pueblo" y recuperar la tradición de los trueques, entendidos de una forma
más compleja al hacerse no solo con productos, sino también con servicios.
El uso de
esta moneda ha sido puesto en marcha por el movimiento ciudadano "Coín en
Transición" para regular los intercambios y aumentar su complejidad al
mezclar productos, tiempo y trabajo.
Según ha
informado el secretario de la Asociación de Productores de "Coín en
Transición", Ildefonso Hernández, el movimiento ha creado unas páginas
amarillas con lo que se ofrece, que va desde productos hortofrutícolas a diseño
de páginas web, trabajos de pintura, albañilería, carpintería o cuidado de
niños.
Esta moneda
no excluye la posibilidad de que se continúe haciendo el simple trueque de tomates por pepinos o una
hora de clases particulares por otra de clases de caballo, sino que permite que
estas transacciones se lleven a cabo con la moneda local y que cada uno decida
para qué y cuándo usarla.
Esta moneda
no timbrada se usa fundamentalmente en establecimientos del municipio donde sus
propietarios trabajan de forma autónoma, en mercados locales o entre personas
del pueblo que ofrecen bienes de todo tipo.
Hernández ha
señalado que hay unas cien personas adheridas a esta red de apoyo e intercambio
mutuo y ha indicado que no es necesario ser propietario como se entiende
tradicionalmente para formar parte de ella porque según este representante "todos podemos
ofrecer algo y todos somos productores aunque solo hay que descubrir de
qué".
Una
filosofía de vida
Este
movimiento ciudadano es una filosofía de vida que ya se ha puesto en marcha en
más de 500 ciudades para promover la sostenibilidad, la economía social y la protección del
medio ambiente.
El único
límite de esta moneda es que cada persona puede enriquecerse en un máximo de
200 coínes o por el contrario, deber un máximo de 200.
Una
de las iniciativas claves
de este movimiento ciudadano es un mercadillo local "transicionista"
de productos hortofrutícolas para promocionar la vuelta a la agricultura y regresar "a
los orígenes", según Hernández.
En este
mercado, que se organiza los viernes, se intercambian frutas y verduras con la
moneda local y además se pretende incentivar el uso de tierras agrícolas que se
encuentran en desuso para que los que las cultiven formen parte de este
movimiento.
El
movimiento "Coín en Transición" también ha logrado participar en el
mercadillo local de los domingos desde el pasado mes de abril con unos treinta
puestos de frutas, verduras u objetos hechos a mano.
En este
mercado utilizan el euro y aunque no todos los que participan en él forman
parte del movimiento, el 100% de lo que se vende ha sido producido en Coín, por
lo que es una formar de hacer que su filosofía de vida llegue a más ciudadanos
y promover la economía sostenible en el municipio.