España tendría pleno empleo sin el gasto en nóminas de las autonomías
El principal problema laboral en España viene derivado de nuestro modelo de Estado autonómico y, por tanto, tiene un origen político. Esta es la conclusión resultante del XIX Congreso Nacional de la Empresa Familiar.
La falta de unidad de mercado a nivel nacional, la anticompetitiva complejidad administrativa interregional, la inexistencia de un modelo educativo estatal, etc., frenan de forma considerable el crecimiento económico, el desarrollo empresarial y en consecuencia disminuyen las oportunidades de creación de nuevos puesto de trabajo.
El gasto de las 17 autonomías y referente a las nóminas (y cotizaciones a la Seguridad Social) de los empleados públicos ascendió en 2016 a 72.000 millones de euros. Es relevante tener en cuenta que en los dos últimos años el endeudamiento de las comunidades autónomas ha aumentando en 45.000 millones de euros.
El gasto salarial del sector público autonómico no solo está concentrado en los funcionarios, que han ganado legalmente su oposición, también cobran un sueldo los cientos de miles de empleados públicos sin oposición y enchufados por los partidos políticos, que se encuentran acomodados laboralmente en administraciones, universidades, empresas públicas, fundaciones y todo tipo de organismos regionales deficitarios y subvencionados.
En este sentido, Cataluña y Andalucía son las dos autonomías que más han disparado el gasto en personal. De hecho, la Generalitat y la Junta son las dos administraciones responsables de la mitad del crecimiento del gasto autonómico en salarios durante el último trienio del 2016. Aunque, todas las comunidades autónomas han aumentado en mayor o menor medida sus costes salariales.
La Administración autonómica incrementa año a año el gasto en salarios públicos, aumentando la deuda y disimulando el déficit a base de pedir dinero prestado. Olvidando que cada empleado público contratado de manera innecesaria e improductiva destruye dos puestos de trabajo necesarios y productivos en el sector privado.
Las autonomías cada vez reciben más dinero del FLA (Fondo de Liquidez Autonómico). En 2016, el citado fondo ha repartido cerca de 25.000 millones de euros entre las autonomías, siendo Cataluña la región que más fondos ha recibido.
Las descuadradas cuentas de las comunidades autónomas solo podrán equilibrarse reduciendo de manera ostensible el entramado administrativo político y público empresarial de nuestras 17 Comunidades Autónomas.
Leónidas Tur