Exige a Pedro Sánchez que decrete 15 días de luto oficial.

Haciendo un Mundo Mejor <estamos@haciendounmundomejor.org>

Estamos ante el mayor drama humano al que se ha enfrentado nuestra nación desde la Guerra Civil, el reconocimiento tras 6 semanas a los verdaderos héroes de esta tragedia, con los aplausos a las 20:00h en las ventanas y balcones de España, está más que demostrado. Sin embargo, el presidente del Gobierno del Reino de España, Pedro Sánchez, está empeñado en ocultarlo y negar la evidencia tapando los muertos y evitando cualquier gesto de luto o de duelo, negándos ei ncluso a vestir la corbata negra. Son más de 20.000 los españoles muertos sin que el Gobierno de muestras oficiales de luto, sin permitir que podamos llorar a nuestros seres queridos. Tratan de evitar las manifestaciones de duelo. Tapan a nuestros muertos para anular toda memoria colectiva que recuerde su responsabilidad criminal en la muerte de nuestros padres, nuestros amigos y demás familiares. Os pedimos también cambiar los aplausos no hay #NadaQueAplaudir ( todos los que se están jugando el tipo, ya han sentido nuestro calor ) ahora lo necesita toda la gente que ha perdido a alguien y ni tan siquiera se ha podido despedir. Todas las noches a las 21:00 horas, sacar una vela encendida a vuestra ventana, balcón o terrazas y mantenerla por 30 minutos. Hacer fotos y colgarlas bajo el hashgtag #NadaQueAplaudir o enviárnoslas a comunicacion@elclubdelosviernes.org . Vamos a hacer llegar nuestro respeto y cariño a esas más de 20.000 familias que han perdido a alquien. Estamos ante un gobierno que en su obsesión por el control de la opinión pública no ha dudado en comprar la voluntad de las televisiones con 15 millones de euros para que le ayuden en la labor deintoxicación y a tapar su responsabilidad criminal en extensión de la pandemia y en la falta de material de protección y test de detección del virus chino. Pero su obsesión por el control social le lleva a tratar de evitar toda muestra de dolor y manifestaciones de condolencias por nuestros seres queridos, escondiendo los cadáveres de nuestros fallecidos y negándose a mostrar los más mínimos gestos de empatía con nuestros seres queridos y con sus familiares. Nuestros muertos merecen memoria y dignidad. Exige a Pedro Sánchez que decrete 15 días de luto oficial. Cada día a las 21:00 una vela a la ventana #NadaQueAplaudir   FIRMO LA PETICIÓN   Todas las firmas las enviaremos en bloque al siguiente enlace ( solo te pedimos los datos estrictamente necesarios ) https://escribealpresidente.presidencia.gob.es/formulario

Ante la ampliación del plazo de confinamiento por el estado de alarma (Agencia Faro)

Agencia FARO agenciafaro@carlismo.es [FAROagencia]



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Madrid, 15 abril 2020, Miércoles de Pascua. Comunicado de la Junta de Gobierno de la Candidatura Tradicionalista (CTrad):

Ante la ampliación del plazo de confinamiento por el estado de alarma

Una nueva prórroga del estado de alarma ha entrado en vigor. Durante el mes de confinamiento, este Gobierno, el peor y más perverso habido en España desde el Frente Popular en 1936, ha manifestado su total incapacidad para parar la pandemia que nos asola. Incapacidad únicamente paliada por la extenuante entrega de los médicos y técnicos sanitarios y demás trabajadores de la sanidad; y por la responsabilidad del pueblo español al asumir sin reservas las instrucciones del confinamiento.

Este Gobierno ha engañado y mentido a los españoles, ha despreciado a las víctimas y a sus familias, ha dilapidado recursos económicos en supuestas y extravagantes compras de suministros a nivel internacional, sin resultado alguno. Además, para evitar la crítica y la indignación, ha establecido un cordón mediático y clientelar, subvencionado con el dinero de todos los españoles, para trasladar una imagen distorsionada de la realidad, a través de un aparato de propaganda donde el mensaje adánico y hasta bobalicón entra en nuestros hogares a través de los monopolios de la información, tanto públicos como privados.

Es de la máxima gravedad la deriva totalitaria que se está imponiendo en todos los órdenes y que ya advertimos en nuestro anterior comunicado. El confinamiento se ha convertido en un arresto domiciliario sin encaje jurídico alguno. El Gobierno ha desbordado las líneas rojas que la legislación establece para la aplicación del Estado de Alarma, convirtiéndolo de hecho en un Estado de Excepción o de Sitio. La imposibilidad de circular, la aplicación de medidas sancionadoras basadas en algunas ocasiones en el abuso de poder de las fuerzas de seguridad del Estado, las cuales, en muchos de los casos, se ven obligadas a obedecer órdenes prevaricadoras de los poderes públicos; igualmente los límites impuestos al libre uso de las redes sociales, en connivencia con los sectores privados que las controlan. Otras gravísimas agresiones que nos aguardan, como la geolocalización, nos hacen temer que esta pandemia va a significar el gran pretexto para imponernos una sociedad orwelliana donde a la dictadura progresista no se le resista la comunidad política.

Mención aparte merece la represión religiosa a la que estamos asistiendo. El decreto que regula el Estado de Alarma garantiza el ejercicio del culto "siempre que no haya aglomeraciones" y, sin embargo, el culto ha sido prohibido. En este sentido, cabe destacar la interrupción policial de los oficios en la Catedral de Granada o el cierre gubernativo de la Capilla Santiago Apóstol en Madrid, entre otras muchas actuaciones que, en la mayoría de los casos, se han sustentado con el silencio cómplice de la jerarquía eclesiástica, pues nuestro derecho al ejercicio del culto nunca puede ser sustituido de manera radical por el placebo telemático o televisivo.

En este miserable plan estratégico, ni siquiera se respetan los límites constitucionales e institucionales del propio sistema en el que se identifican. La limitación de las funciones del parlamento (su "templo de la democracia") es el mejor síntoma de la ruptura de sus propias reglas de juego. Igualmente se ha iniciado la voladura de su sistema jurídico positivo, donde no se respeta el principio de legalidad, emitiendo órdenes ministeriales vulneradoras del derecho de propiedad. Dentro de esta estrategia se inscribe una especie de reedición de los "Pactos de la Moncloa", es decir, finiquitar el actual sistema constitucional y sustituirlo por otro igualmente perverso, pero que se compadezca mucho mejor con los intereses totalitarios del frentepopulismo.

Destacar en el ámbito económico, la deliberada destrucción de nuestro pobre tejido industrial, imponiendo restricciones al trabajo productivo durante quince días, que no ha surtido el más mínimo efecto a fin de hacer descender el número de fallecidos y contagiados. En segundo lugar, fiarlo todo a una acción salvadora mutualizada de la Unión Europea. Sabemos por experiencia cómo nos trata dicha organización tanto a nivel político como económico. No pongamos, pues, ninguna esperanza en sus actuaciones futuras. En tercer lugar, la asfixia impositiva a las pequeñas empresas, a los comerciantes y a los autónomos, negándoles el más mínimo alivio o prórroga a sus obligaciones tributarias. En cuarto lugar, el intento de esquilmar nuestras mermadas arcas, imponiendo una renta básica para los sectores lumpen e improductivos que son, en alto grado, la base electoral de los partidos que sustentan el Gobierno.

Hemos mantenido una alta dosis de prudencia durante el Estado de Alarma, llamando a cumplir estrictamente las observaciones. Seguiremos haciéndolo en bien de todos. Ya llegará el momento de que el pueblo español exija responsabilidades de todo orden a este gobierno ineficaz y mentiroso; pero, más allá de esta justa exigencia, deberemos redoblar la lucha por nuestros principios, por transmitir que la única solución al orden de convivencia política es la restauración del orden natural y cristiano en España a través de la defensa de la Tradición.

Pidamos a Cristo Rey, por intercesión de Nuestra Madre, la Santísima Virgen, que acoja el Alma de los fallecidos. Pidamos por el eterno descanso, al lado del Padre, de María del Carmen Arrizabalaga Arcocha, Ángela Prado y Pintó, María del Pilar Bertos Herrera y de la misionera Ana María de Oñate y Prendergast, defensoras de la Causa tradicionalista.

Necesitamos un cambio de rumbo

Necesitamos un cambio de rumbo


 Españoles de a pie <carlos@espanolesdeapie.es>

Nosotros como ciudadanos:

Una vez que la crisis del coronavirus empieza a remitir ya no tenemos que preocuparnos sólo por vencer a la pandemia sino además ver cómo afrontamos sus consecuencias.

Esta crisis ha requerido la toma de decisiones políticas de gran envergadura. Se ha confinado a millones de personas, se ha paralizado toda la actividad económica y se ha tenido que gestionar una crisis sanitaria sin precedentes.  Pero si hay un elemento que ha caracterizado la gestión política durante este tiempo, éste ha sido la falta de liderazgo y de capacidad. Se ha actuado lentamente, sin previsión alguna, bajo vaivenes y sin criterio.

Y la razón fundamental es clara; las personas encargadas la gestión de esta crisis no tienen las capacidades ni la experiencia necesarias para afrontarla.

Pedro Sánchez tiene astucia política pero no destaca por su capacidad de dirigir situaciones complejas porque nunca ha tenido que hacerlo, Pablo Iglesias sigue pensando que las soluciones simples y trasnochadas que valen para una tertulia en la facultad pero no funcionan en la realidad e Iván Redondo sabe ganar unas elecciones, pero no tiene experiencia de gestión y sus criterios buscan el bien partidista.

Para que el futuro no sea tan negativo como ha sido el presente, para  esta nueva etapa de reconstrucción en medio de las consecuencias de la pandemia, reclamamos un cambio de rumbo.

Las personas que han demostrado que no saben cómo gestionar una crisis no son las adecuadas para afrontar las derivadas que se presentan devastadoras.

No hay precedentes para esta situación y está claro que hoy no contamos en el gobierno con las personas necesarias para sacarnos de ella. Necesitamos que los partidos políticos se pongan de acuerdo de alguna forma excepcional para este momento excepcional, pero con otras personas llevando el timón.

Tenemos que cambiar de rumbo si no queremos que el coronavirus nos postre como país durante muchos meses o años.

Es la hora de dejar de pensar en clave partidista y de pensar en lo mejor para el país, en lo mejor para la gente. De arrimar todos el hombro y de que las personas que hoy nos dirigen sean generosas y den un paso a un lado.

Por el bien de todos, es la hora de un cambio de rumbo.