Sánchez Saus: “La tolerancia de Al Andalus es un cuento de las mil y una noches”
En su libro ‘Al Andalus y la cruz’ este catedrático de Historia Medieval
hace añicos el tópico de una España musulmana tolerante ante una España
cristiana fanática y genocida.
Rafael
Sánchez-Saus, autor del libro 'Al-Andalus y la Cruz' / RSS
Rafael Sánchez-Saus es uno de los mayores expertos en la
España musulmana, que no es el Edén tolerante e ilustrado que nos han querido
vender determinados académicos. En su documentado trabajo Al Andalus y la
cruz (Editorial Stella Maris) demuestra que bajo la dominación
árabe, muchos cristianos vivían peor que los esclavos.
Un dato, unido a la violencia como referente histórico del
islam desde la figura y la época de Mahoma, que conviene retener en un momento
como el actual, con un Occidente que ha renunciado a sus raíces y que está
inerme demográfica y moralmente ante el resurgimiento del islam.
Rafael
Sánchez-Saus, autor del libro 'Al-Andalus y la Cruz' / RSS
Un dato, unido a la violencia como referente histórico del
islam desde la figura y la época de Mahoma, que conviene retener en un momento
como el actual, con un Occidente que ha renunciado a sus raíces y que está
inerme demográfica y moralmente ante el resurgimiento del islam.
Año 711: ¿Tendríamos invasión árabe
de no ser por las guerras intestinas de los godos?
La guerra civil en el reino godo y la división existente
entre su nobleza propició en gran medida el desenlace de la invasión árabe,
pues Tarik contó con una información, un asesoramiento y unos apoyos que
facilitaron mucho su acción.
¿Entonces fue traición y no sólo
invasión?
Pero no debe olvidarse que el Imperio Omeya era una gran
potencia militar en plena expansión, capaz de poner en pie y lanzar a
expediciones lejanas ejércitos muy numerosos, bien pertrechados y sumamente
motivados. No me cabe duda de que, de haber fracasado el intento en 711,
hubiera habido otras oleadas y, muy posiblemente, el reino visigodo hubiera
acabado destruido de todas formas.
Antes de seguir, ¿el islam lleva la
violencia en los genes o ésta es una desviación herética?
Tras la huida de La Meca a Medina (622), Mahoma y sus
gentes comienzan la construcción del primer Estado islámico, algo que se hizo
sin excluir en ningún momento la posibilidad y la realidad de la violencia, de
la guerra e incluso el exterminio de quienes se les oponían. La nueva religión
crece y se difunde unida desde el principio a un poder político y a un modelo
de sociedad que no desdeñan la violencia para implantarse. Y ese comportamiento
está avalado por el del mismo Profeta, que lo realizó además de forma muy
exitosa. Ese ejemplo, como todo lo relacionado con Mahoma, ha estado muy
presente a lo largo de la historia del Islam y lo ha marcado muy fuertemente.
Vd. sostiene en su libro que la
tolerancia de Al Andalus con los cristianos es un cuento chino…
En todo caso un cuento de las mil y una noches. El poder
en al-Andalus nunca se planteó alcanzar un modelo de sociedad que pudiera
definirse con lo que hoy queremos significar con la palabra tolerancia.
El estatuto de “protección” o “dimma” sometía a judíos y
cristianos –especialmente a éstos en España- a una segregación religiosa que
tenía graves consecuencias en los planos jurídico, social, moral y económico.
Estaba permitido el culto, aunque sometido a restricciones, pero no había ni de
lejos una situación que pudiera calificarse de libertad religiosa. Más aún, si
eso era tolerancia, todas los sociedades previas lo habrían sido, pues excepto
en momentos de fuerte crisis o de luchas sectarias, era corriente la
convivencia de distintos credos en toda el área mediterránea.
El cristiano sólo tenía dos salidas:
o apostataba de la fe o se convertía poco menos que en esclavo.
Lo característico de la “dimma” no es ya la discriminación
a que somete a los cristianos, sino el hecho, ampliamente postulado y
justificado por los tratadistas musulmanes, de que los infieles deben vivir en
la humillación y en el continuo reconocimiento de la superioridad del musulmán
para que así reconozcan su miseria y crezca en ellos el deseo de convertirse a
la verdadera fe. Algunos estudiosos creen, en virtud de esto, que la situación
de los “dimmíes” era, de hecho, peor que la de los esclavos, pues estos no
siempre vivían sometidos a la degradación moral que se procuraba imponer a los
cristianos.
“No es
exageración decir que la dimma era como el apartheid, salvando las distancias”
El arabista Serafín Fanjul ha
comparado la dimma al apartheid ¿exagera?
Sinceramente, no creo que sea una exageración en términos
generales. El apartheid tiene un fundamento racial y la “dimma” religioso, pero
sus consecuencias, salvadas las distancias cronológicas y culturales, no eran
muy distintas.
Los cristianos mozárabes que vivían
bajo el yugo del califato ¿era unos pragmáticos?
Precisamente bajo el califato (929-1031) es cuando los
mozárabes gozan de una situación más aceptable, una vez que habían dejado de
constituir un problema para los gobernantes musulmanes y empezaban a ser ya una
minoría cada vez menos relevante. Los momentos más duros se vivieron antes y
después del califato, sobre todo después, tras la llegada a al-Andalus de
almorávides y, especialmente, almohades.
¿Y algunos cristianos fueron héroes y
otros colaboracionistas?
En cuanto a la actitud de los mozárabes, que fueron la
mayoría de la población de al-Andalus durante más de doscientos años y una
minoría muy significativa durante otros doscientos, hasta su total desaparición
a mediados del siglo XII, hubo de todo: desde verdaderos héroes de la fe y de
la libertad, que no dudaron en arrostrar el martirio, hasta infames que se
aprovechaban de los sufrimientos de sus correligionarios para medrar económica
y políticamente al servicio de los opresores.
Pero la mayoría optó por sobrevivir…
La mayoría de los cristianos, como en todas partes en esas
circunstancias, trató de sobrellevar la situación lo mejor posible, procurando
ser fieles a su fe y preservar su cultura en circunstancias a veces muy
difíciles, aunque es sabido que a largo plazo las comunidades mozárabes se
desintegraron bajo el peso de la “dimma”, que llevo a unos a la apostasía, a
otros muchos a la emigración a tierras cristianas y, en los tiempos finales, a
la deportación al norte de África.
Algunos, como San Eulogio, prefirieron
el martirio ¿hubo un genocidio mozárabe?
No creo que pueda hablarse de genocidio hasta los últimos
tiempos, en el siglo XII, cuando sí se produce una persecución que pretende
erradicar a los cristianos de al-Andalus, y lo consigue. Lo que hubo antes no busca
la aniquilación de los cristianos, que no hubiera convenido al poder musulmán
de ninguna manera ni forma parte del modelo ortodoxo musulmán, sino su
sometimiento, la erosión de sus comunidades para hacerlas más dependientes y
abocarlas hacia la progresiva conversión al islam. En todo ello se empleó a
fondo el Estado omeya, cuyo objetivo era hacer de al-Andalus un territorio
plenamente árabe y musulmán regido por su dinastía.
Por otra parte, san Eulogio no prefirió ningún martirio ni
lo provocó.
Pero acabó decapitado…
Fue condenado, acusado de proselitismo, porque su hermana,
con la que vivía, acogió en su casa a una joven musulmana que se había
convertido al cristianismo. Eso sí, san Eulogio fue el alma del movimiento
pacífico de resistencia intelectual y religiosa que intentó romper, o por lo
menos hacer más llevaderas, a mediados del siglo IX, las limitaciones que la
“dimma” imponía a los cristianos. Es el movimiento llamado, impropiamente a mi
juicio, de los “mártires voluntarios” que tuvo en Córdoba su centro.
Dice vd. en su libro que al aniquilar
a los mártires, Al Andalus quedó abocado a la destrucción ¿Por qué?
Al rechazar las condiciones de la “dimma” sin recurrir a
la violencia ni negar la legitimidad del poder de los emires, san Eulogio y sus
compañeros planteaban, de hecho, una posibilidad de verdadera convivivencia y
pluralismo que no se basase en la imposición y la humillación. Ese es un camino
que el poder omeya se negó a recorrer, ni siquiera a plantearse, azuzado por
ulemas y alfaquíes, ahogando en sangre la protesta. Con ello anuló la
posibilidad de una verdadera convivencia entre comunidades en la España
medieval. La reconquista cristiana mediante la violencia quedó así, a mi
juicio, plenamente legitimada si no lo estaba ya.
“El mundo
académico ha buscado contraponer la imagen de un al-Andalus edénico a la de una
España fanática, atrasada y genocida”
El mundo académico ha idealizado Al
Andalus ¿qué busca con ello?
La idealización actual de al-Andalus procede,
esencialmente, de la salvedad que se hace en su caso de la aplicación de los
métodos de crítica histórica que se emplean para cualquier otro momento de la
Historia de España. Esos métodos han alcanzado su madurez en los últimos
cuarenta o cincuenta años, décadas en las que, por motivos políticos y con la
connivencia de amplios sectores mediáticos, culturales y académicos, se ha
buscado contraponer la imagen de un al-Andalus edénico a la de una España
cristiana fanática, atrasada y genocida. Cuando se trata de al-Andalus, se
pueden narrar las graves atrocidades que tanto menudearon en su historia, pero
se suele evitar escrupulosamente, al contrario que cuando se trata de otros
momentos, cualquier juicio moral.
Exaltar acríticamente a la España
musulmana es una irresponsabilidad en estos momentos…
Sí, porque, además de incurrir en un grave falseamiento de
la historia, se contribuye a la elevación de un mito que tiene ya hoy efectos
peligrosos. Se debilita el sentido de pertenencia de los españoles a la cultura
occidental y se provoca un desafecto hacia las raíces cristianas de esa
pertenencia. En estos momentos creo que ello conlleva auténticos riesgos.
¿Y enseñar la fe islámica en los
colegios españoles es irresponsable?
A mí no me parece bien que se practique la religión
indignamente en sótanos ni garajes. Los musulmanes tienen derecho a rezar en
mezquitas y a que sus hijos sean formados en su fe. Lo que defiendo y deseo
para los cristianos, también lo quiero para las otras religiones, incluida la
islámica. Ahora bien, creo que los gobiernos occidentales deberían exigir
reciprocidad a los países musulmanes para los cristianos y para los fieles de
otras religiones. No en defensa del cristianismo, que como estados
aconfesionales en unos casos o laicos en otros no les corresponde, sino en defensa
de los derechos humanos, de los cuales el de libertad religiosa es, como
resulta sabido, el más importante históricamente después del de la vida.
¿Es compatible la libertad religiosa
con la enseñanza de una religión que no propugna los valores de la tolerancia,
sino los de la sumisión?
La ley, que debe obligar a todos por igual excepto en los
casos en que se articule el derecho a la objeción de conciencia, debe hacerse
cumplir siempre. En ese sentido, lo que propugne o deje de propugnar una
determinada religión para sus fieles es secundario. El problema sólo surge
cuando se debilita la conciencia ciudadana y política en torno a la necesidad
de que todos los individuos que componen una sociedad respeten las normas
comunes.
No siempre los musulmanes las
respetan en Europa
Los ciudadanos de religión musulmana en Europa debieran
ser conscientes de que viven en sociedades que se han construido sobre valores
que quizá ellos no compartan en su plenitud, pero que deben acatar y a los que
deben lealtad. Es patente, por otra parte, que ese puede ser ya el caso de
muchos creyentes cristianos en la Europa actual, pero a nadie se le ocurre
reclamar, ni nadie estaría dispuesto a otorgar, un trato de excepción para
ellos.
Dice Julián Marías que España fue un
caso único en Europa, ya que pudiendo ser musulmana eligió ser cristiana y
luchó por ello durante ocho siglos.
Eso fue así ciertamente, aunque quizá yo no lo formularía
de ese modo. Yo diría que sobre el recuerdo y el mantenimiento de la tradición
hispanogoda, e insertándose plenamente en la Cristiandad latina, los reinos
cristianos fueron capaces de crear y hacer triunfar una alternativa a la
sociedad arabizada e islámica que al-Andalus representaba. Esa alternativa es
España.
¿Qué fue más determinante en la
Reconquista: la unidad de los reinos cristianos o la desunión de los
musulmanes?
Los reinos cristianos no siempre, ni mucho menos, actuaron
unidos; más bien al contrario, aunque poco a poco fue imponiéndose la voluntad
de unir territorios que poseían desde antiguo una indudable conciencia de su
identidad común. Desde luego, la experiencia de que la progresiva unidad hacia
cada vez más fuertes a las monarquías resultantes fue un incentivo de primer
orden en el empeño.
Pero con el tiempo terminaron
reconquistando toda España
Por otra parte, la superioridad de la España cristiana
sobre al-Andalus se debió a causas complejas y deudoras de la paralela
supremacía de la Cristiandad latina sobre todos sus vecinos, no sólo musulmanes.
Esa supremacía se va asentando ya desde el siglo XI y es un hecho patente en el
XIII. Entre esas fechas se produce precisamente el gran impulso de la
Reconquista.
¿No hicieron los Reyes Católicos lo
mismo que los antiguos invasores al expulsar a los musulmanes?
No hicieron lo mismo, puesto que los musulmanes no
obligaron a convertirse a los cristianos ni los expulsaron, ni hubieran tenido
poder ni capacidad para ello en el siglo VIII, pues eran una pequeña minoría en
un país cristiano. Las circunstancias eran totalmente diferentes y no es
posible trazar paralelismos con ochocientos años por medio. Algo curioso es que
entre el exilio y la conversión, en 1502 la casi totalidad de los mudéjares
prefirieron la conversión, aunque fuese fingida en muchos casos. Sin embargo,
en 1492 la mayoría de los judíos prefirió el exilio a la conversión.
Los críticos de la Reconquista suelen
ser críticos con la Conquista (de América) ¿es casualidad?
Muchos españoles han interiorizado la leyenda negra hasta
el punto de vivir como auténticos renegados en su propia patria. Es algo muy
triste porque ello les impide comprender de forma más integradora y plena la
verdadera grandeza de la historia y de la cultura españolas.
“Muchos
europeos consideran que el origen de todos los males de la Humanidad es la
civilización occidental”
¿También ocurre algo parecido en el
resto de Europa?
Es curioso que ese fenómeno se está extendiendo hoy al
conjunto de Europa, de forma que hay muchos europeos que no se identifican con
los logros de la civilización occidental, a la que consideran el origen de
todos los males de la Humanidad. Mis noticias son que el revisionismo en clave
negativa de la propia historia ha llegado incluso a Francia.
Refugiados en Europa: ¿avalancha o
invasión?
Un fenómeno que se debió prever y no se previó, que no se
ha analizado con serenidad, que se ha convertido en nuevo motivo de
confrontación interna por una pésima gestión. Un problema que ha puesto de
manifiesto los mecanismos perniciosos de formación de la opinión pública, la
manipulación grosera de los medios, la falta de escrúpulos a la hora de jugar
con los sentimientos de la gente, la falta de conexión entre los políticos y
los sectores sociales que asumen los sacrificios derivados de sus decisiones…
Todo esto se une a la crisis humanitaria, que sacude las conciencias, y a la
preocupante sensación de que esto no ha hecho más que empezar y de que la UE es
una entelequia incapaz de afrontar sus responsabilidades.
¿El talón de Aquiles de Europa es su
renuncia a las raíces cristianas?
Esa renuncia es el talón de Aquiles de Europa ante el
islamismo y ante la mayor parte de los problemas de las actuales sociedades
europeas.
Europa está pagando ahora la factura
de haber dejado de tener hijos y haber recurrido a la mano de obra musulmana…
La realidad es que la natalidad ha caído verticalmente en
los países árabes en los últimos años, así como entre los musulmanes europeos o
instalados en Europa. Aún sigue siendo mayor que entre los europeos autóctonos,
pero eso no tiene mucho mérito. Eso sí, está a las puertas una generación que
es el resultado de unos años en los que las familias musulmanas fueron mucho
más prolíficas, y eso va a tener consecuencias en los años venideros porque el
problema es que ello va a suceder coincidiendo con una fuerte radicalización de
las nuevas generaciones musulmanas en Europa. Se avecina un panorama
complicado, sobre todo para los países que apostaron más intensamente por el
fracasado modelo multicultural.
“La
civilización se defiende con ideas, élites responsables, pueblos fecundos y con
el derecho”
¿La civilización se defiende con
artillería o con demografía?
La civilización se defiende con ideas, con elites
creadoras y responsables, con instituciones fuertes, con pueblos sanos y
fecundos, y con el derecho.
En Europa el islam puede llegar a los
70 millones de musulmanes en 2050 (Pew Research) ¿habrá un pulso entre la ley
islámica y la democracia?
La mayor parte de estas proyecciones suelen resultar
equivocadas. Deberíamos concentrarnos en los problemas actuales y no juzgar con
criterios de hoy situaciones dudosas que no sabemos si pueden plantearse o no,
ni en qué términos. Lo que sí sabemos es que, con musulmanes o sin ellos, en
2050 la población europea estará muy envejecida y la sociedad, tal como la
conocemos, será simplemente insostenible.
Suben los musulmanes, se mantienen
los cristianos, y se reduce el número de indiferentes… ¿estamos abocados a las
guerras de religión?
Tal como están las cosas habría que movilizar a los
setentones y encargar las tareas de retaguardia a los octogenarios. No me
parece razonable agitar hoy por hoy esos fantasmas.
Paradójicamente la yihad ha resurgido
con el apoyo de Occidente (EEUU aliado de Arabia Saudí)
Hace sólo veinticinco años Occidente debía hacer frente a
la tremenda amenaza del comunismo expansivo y agresivo, algo que hemos olvidado
con demasiada rapidez. Frente a eso, había que asegurar suministros básicos –el
petróleo en primer lugar- y controlar áreas estratégicas que de ninguna forma
podían caer en manos enemigas. Vivimos todavía los efectos de decisiones que se
tomaron bajo condiciones que ya no son las actuales.
¿Terminarán imponiéndose los
musulmanes moderados a los violentos en el mundo árabe?
Desgraciadamente y al margen de alguna excepción, en el
mundo islámico no veo otra posibilidad en estos tiempos que la alternancia
entre regímenes moderadamente islamistas, tiránicos y corruptos por un lado, y
regímenes extremadamente islamistas no menos corruptos y despóticos de otro.
¿Cree que España puede terminar
llorando como mujer lo que no supo defender como hombre?
España hizo frente a situaciones mucho más duras y graves
que las que ahora padecemos. Los españoles nos crecemos siempre en la adversidad.
Entonces…
Pero somos un pueblo que se deja ir fácilmente cuando las
cosas van bien. Y tenemos una clase dirigente muy deficiente.