El Gobierno de Pedro Sánchez ha publicado en el BOE una orden ministerial que le permite incautarse de viviendas privadas para víctimas de violencia doméstica (o de género, o machista, o como ustedes quieran) y para desahuciados.
No es competencia del Gobierno central pero ya saben que el estado de alarma consiste en eso: plenos poderes para Sánchez e Iglesias… y el asunto les está gustando.
Un atentado contra la propiedad privada, sólo apto para regímenes soviéticos o maoístas.
Y no se pierdan tampoco el tercer punto, en el que no se dice quién fija el importe de la renta a abonar. Así, el Estado podrá forzar el alquiler que le venga en gana, tras robarle el piso al propietario.
¿Seguro que exageran quienes dicen que con este Gobierno y con este estado de alarma, España se está bolivarizando, esto es, convirtiéndose en una república bananera?
Caminamos hacia el caos podemita, con el socialista Sánchez al frente.